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¿Qué es el THCV y qué lo hace especial?

¿Qué es la THCV?

La tetrahidrocannabivarina o THCV, es un cannabinoide que se encuentra en la planta de cannabis. Su estructura química es similar a la del THC (tetrahidrocannabinol), pero difiere en la longitud de la cadena lateral. El THCV tiene una cadena lateral dos carbonos más corta que el THC. Debido a esta diferencia en la estructura molecular, tiene sus propiedades y efectos específicos. Aunque la THCV se descubrió en 1973, todavía no es tan popular como otros cannabinoides, como el CBD, el CBG y el CBN.

La THCV se produce como un subproducto del ácido cannabigeróvarico (CBGVA), que se descompone en ácido tetrahidrocannabivarico (THCVA) por una enzima y finalmente se convierte en THCV mediante el proceso de descaboxilación (exposición al calor o a la luz). Se ha informado de que las variedades sativas africanas originales  contienen la mayor cantidad de THCV.

Dos hojas de cannabis con un frasco gotero sobre una superficie de madera; Junto a ellos se muestran las estructuras moleculares marcadas del THC y el CBD.

Efectos de la THCV

A diferencia del THC (delta-9-THC), la THCV no tiene efectos psicoactivos cuando se toma en pequeñas dosis. La experiencia de algunos consumidores muestra que la THCV puede aumentar la sensación de alerta y claridad mental, pero al mismo tiempo puede causar algunos cambios en la percepción. Muchas personas recurren a la THCV por sus efectos relajantes. Otros efectos reportados incluyen:

  • Mejora de la concentración y la productividad
  • aumento de la energía mental (sin "nubosidad mental")
  • Percepción más lenta o más rápida del tiempo
  • Diferentes percepciones de los sonidos, la música y los colores
  • Supresión del apetito

Algunos estudios sugieren un posible beneficio terapéutico para estas afecciones:

  • Enfermedad de Parkinson (control de los síntomas de la discinesia)
  • Procesos inflamatorios en el cuerpo
  • Obesidad
  • Diabetes
  • Ansiedad, ataques de pánico
  • Osteoporosis (THCV para promover el crecimiento óseo)

En cuanto a los efectos secundarios, aún no hay mucha información disponible. Algunos usuarios informan sentirse cansados. Al tomar THCV en dosis altas, podrías experimentar cualquiera de los efectos secundarios atribuidos al THC, como boca seca, ojos rojos, deterioro de la memoria a corto plazo, aumento de la frecuencia cardíaca o paranoia.

Aunque todavía no tenemos constancia de ningún efecto secundario grave, al igual que con el uso de otros cannabinoides, es aconsejable tener precaución, es decir, empezar con una dosis baja.

La THCV y el sistema endocannabinoide

Al igual que otros compuestos de la planta de cannabis, la THCV interactúa con el sistema endocannabinoide (SEC). Este sistema de señalización celular se encuentra en el organismo de todos los mamíferos. Su función principal es mantener la homeostasis , la estabilidad del entorno interno, y regular varios procesos en el cuerpo, tales como:

  • Buen apetito
  • digestión
  • respuesta inmunitaria
  • memoria
  • dormir
  • humor

El SEC también participa en el mantenimiento de la homeostasis energética y en la regulación del metabolismo de los lípidos y la glucosa.

El sistema endocannabinoide está formado por endocannabinoides, enzimas y receptores cannabinoides, los más conocidos de los cuales son CB1 y CB2. Los receptores CB1 están presentes principalmente en el sistema nervioso central (principalmente en el cerebro), pero también en otras células de todo el cuerpo, los receptores CB2 se encuentran principalmente en el sistema inmunitario y los tejidos periféricos.

Los efectos dependen de dónde se encuentre el receptor y qué endocannabinoide se une a él. Por ejemplo, los endocannabinoides pueden bloquear  las señales de dolor dirigiéndose a los receptores CB1 de la médula espinal. O pueden unirse al receptor CB2 de las células inmunitarias, en los casos en los que  se está produciendo un proceso inflamatorio en el organismo. Por cierto, la inflamación es un síntoma común de una enfermedad autoinmune.

Estudios hasta la fecha muestran que la THCV se une a los receptores CB1 y CB2 con una potencia significativa, aunque el mecanismo exacto aún está bajo investigación.

¿Tiene la THCV potencial terapéutico?

Dado que el cannabinoide THCV interactúa con los receptores endocannabinoides  de una manera específica y, al mismo tiempo, aún no se han identificado efectos secundarios graves que sean comunes con algunos medicamentos, existe la posibilidad de su uso terapéutico. Además de la obesidad y la diabetes, también podría ayudar con las enfermedades óseas y en el tratamiento o alivio de los síntomas de las enfermedades neurodegenerativas. Algunos estudios también analizan la posibilidad de usar THCV en la epilepsia. Echemos ahora un vistazo a algunas de las investigaciones con más detalle.

 

Un hombre con los ojos cerrados disfruta comiendo una hamburguesa sobre un fondo rosa. Lleva un polo gris.

¿Puede la THCV suprimir el apetito?

La THCV se menciona a menudo en relación con la pérdida de peso, la obesidad y el tratamiento de la diabetes. Resulta que a diferencia del THC, que estimula el apetito, el THCV tiene exactamente el efecto contrario en este sentido.

Las investigaciones confirman que  la THCV reduce el apetito, aumenta la saciedad y regula el metabolismo energético, lo que la convierte en un remedio clínicamente útil para la pérdida de peso y el tratamiento de la obesidad y la diabetes tipo 2.

Tratamiento de la obesidad

Uno de los fármacos que se suponía que iba a aportar avances y esperanzas en el tratamiento de la obesidad era el rimonabant. Esta droga sintética, aprobada en Europa en 2006, actúa bloqueando el receptor CB1, lo que reduce el apetito (hipofagia). Aunque el rimonabant causó una reducción significativa en el peso corporal de los sujetos en comparación con el placebo y demostró ser eficaz en la regulación de los niveles de glucosa y la descomposición de los ácidos grasos, tuvo que ser retirado del mercado mundial en 2008. Además de las náuseas y las infecciones del tracto respiratorio superior, también se ha demostrado que causa  efectos psiquiátricos adversos graves, como depresión y pensamientos suicidas.

¿Y cómo se relaciona con la THCV? Resulta que  la THCV, al igual que el rimonabapant, es un  antagonista  selectivo del receptor CB1 (bloqueador), pero no muestra los mismos efectos secundarios que el fármaco. A diferencia del THC, la THCV también produce efectos hipofágicos tanto en ratones en ayunas como en ratones alimentados. Esto sugiere que la THCV tiene un gran potencial para tratar la obesidad.

La THCV y la diabetes: ¿Qué han encontrado los estudios?

Algunos estudios no mostraron un efecto significativo sobre el peso corporal o la ingesta de alimentos, pero mostraron un fuerte efecto sobre la reducción de la glucosa en sangre y los triglicéridos hepáticos. Los estudios realizados en ratones han demostrado que la THCV restaura la sensibilidad a la insulina. Por esta razón, los investigadores creen que la THCV puede ser útil en el tratamiento del síndrome metabólico y la diabetes tipo 2, ya sea sola o como tratamiento complementario combinado con otras opciones terapéuticas.

En otro estudio piloto aleatorizado, doble ciego y controlado con placebo, se evaluó la seguridad y eficacia de la THCV y el CBD en pacientes con diabetes tipo 2 midiendo los parámetros de glucosa y lípidos en sangre. Sesenta y dos voluntarios de pacientes con diabetes tipo 2 no tratados con insulina fueron divididos en grupos. Algunos pacientes tomaron solo CBD, otros solo THCV y algunos recibieron ambos cannabinoides al mismo tiempo. El estudio concluyó que los cannabinoides THCV y CBD, administrados solos o en combinación, son bien tolerados en la diabetes tipo 2. La THCV redujo significativamente los niveles de glucosa, aumentó la función de las células beta y la concentración de adiponectina en pacientes con diabetes tipo 2.

Por lo tanto, está claro que la THCV puede servir de modelo para el desarrollo de nuevas sustancias activas para el control glucémico, especialmente en diabéticos tipo 2, ya que proporciona una ventaja terapéutica sobre otros análogos cannabinoides además de sus efectos hipoglucemiantes e hipolipidémicos.

Ayuda con la osteoporosis

Como ya se ha mencionado, la THCV también se une al receptor endocannabinoide CB2. Este receptor también se encuentra en los huesos y promueve la formación de nuevo tejido óseo. Al regular la actividad de las células óseas a través del receptor CB2 y al mismo tiempo ayudar a reducir la inflamación, la THCV ofrece su uso en el tratamiento de la osteoporosis.

Un estudio publicado en 2012 en la revista científica Frontiers in Endocrinology, que analizó el papel de los cannabinoides en la formación de huesos, sugiere que la THCV y algunos otros cannabinoides estimulan la formación de nueva masa ósea, la producción de colágeno y la actividad de una enzima (fosfatasa alcalina) en las células de la médula ósea. Sin embargo, todavía no se sabe por qué mecanismos los fitocannabinoides como el THCV regulan la actividad de las células óseas. 

Aliviar los síntomas de la enfermedad de Parkinson

Los compuestos a base de cannabinoides son prometedores para el tratamiento de la enfermedad de Parkinson (EP). El bloqueo de los receptores CB1, muy abundantes en las estructuras de los ganglios basales, puede ser eficaz para reducir la inhibición motora típica de los pacientes con EP.

Según los estudios realizados hasta la fecha, el fitocannabinoide THCV parece tener un perfil farmacológico especialmente adecuado para los pacientes con EP, ya que tiene propiedades antioxidantes y la capacidad de activar los receptores CB2 pero también de bloquear los receptores CB1, por lo que podría servir para aliviar los síntomas y ralentizar o incluso detener  la neurodegeneración Aunque otros fitocannabinoides, como el THC y el CBD, también presentan propiedades antioxidantes, el THC afecta a la inhibición motora y el CBD, a su vez, sólo tiene una actividad insignificante en los receptores CB1 y CB2.

Un estudio publicado en 2011 en el British Journal of Pharmacology sugiere que la THCV podría tener la capacidad de aliviar los síntomas del Parkinson y proteger a las células nerviosas (neuronas) de una parte del cerebro llamada sustancia negra de la muerte. Es la pérdida de neuronas que producen el neurotransmisor dopamina que es la causa de la enfermedad de Parkinson.

 

Una mujer con un vaso de agua en la mano

La esquizofrenia y el efecto de la THCV sobre la dopamina

El receptor 5HT1A es uno de los muchos subtipos de receptores de serotonina. Se ha demostrado que la activación de los receptores 5-HT1A aumenta la liberación de dopamina en algunas partes del cerebro (en la corteza prefrontal, el cuerpo estriado y el hipocampo) y puede mejorar los síntomas de la esquizofrenia y la enfermedad de Parkinson.

Los resultados de una investigación publicada en 2014 muestran que la THCV tiene la capacidad de interactuar con los receptores 5-HT1A. Al afectar a la función del receptor 5HT1A, puede mejorar una serie de enfermedades neuropsiquiátricas, como la esquizofrenia, la ansiedad y la depresión, así como afectar positivamente a las capacidades cognitivas, por lo que la THCV podría, por ejemplo, aliviar las deficiencias del aprendizaje o de la memoria.

Conclusión

La tetrahidrocannabivarina (THCV) se descubrió hace 50 años, pero no ha recibido tanta atención como otros cannabinoides. Esto puede cambiar pronto, ya que varios estudios científicos ya han revelado su potencial y posibles propiedades terapéuticas en el tratamiento de la obesidad, la diabetes, la osteoporosis y las enfermedades neurodegenerativas. Sin embargo, para que la THCV sea finalmente aprobada como una sustancia segura y apta para el tratamiento de ciertas enfermedades, es necesario esperar las conclusiones de nuevas investigaciones para verificar los posibles efectos secundarios y la seguridad de este cannabinoide.

 

Autor: Canatura

 

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Foto: Shutterstock

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